Los africanos os queremos un huevo, y dos , y tres…

2010/03/29

Algunas veces no hay más remedio que soltar un taco a tiempo -que diría el difunto Cela- y esta es una de ellas. También podría ser una buena ocasión para abrir en este medio una galería de indeseables, oportunidad que ya perdimos en su día cuando el orondo Cañete opinó sobre esperas y mamografías. Algunos dirigentes políticos pueden tener las cuentas -las cuentas, insisto que digo- tranquilas: algunos ciudadanos no les votaremos ni les apoyaremos en la puta vida.

En fin, lo que nos motiva es lo que ha ocurrido en las últimas horas, cuando unos dirigentes del llamado Partido Popular español, con motivo del V Encuentro España-África, han querido atacar a un notorio y discutible adversario político pretendiendo darle una buena patada que  ha terminado en el culo no de éste sino de los más débiles. La maniobra podría tener su rendimiento: Valencia, donde se ha emitido la declaración,  es una zona de relativa implantación de extrema derecha y hay que ir preparando acá y allá el cazo de los votos. No vaya a ser que se los lleven otros y nos comprometan el chollo.

El sr. González Pons apareció hace años como cara amable de supuesta derecha civilizada frente a los bochornosos ministros aznaristas. Ahora acaba de decir que es más importante «resolver los problemas de los parados españoles» que ocuparse de los problemas de Africa. «Me gustaría que el presidente del Gobierno, en lugar de ocuparse de cosas planetarias, se ocupara de cosas españolas», añade.  Y dale: «Hoy le estamos viendo resolver los problemas de las mujeres de Africa, que son muy importantes, pero a mí me gustaría verlo resolver los problemas de las mujeres en paro en España». Hay que elegir, majete: o lo uno o lo otro, porque no son solamente cosas no relacionadas sino más bien no compatibles.

Está claro hacia donde hay que disparar en caso de problemas: no hacia los enormes beneficios del capital, no hacia las subvenciones a fondo perdido a las grandes fortunas, no hacia el egoísmo sin tasa, no hacia el status blindado de los obscenamente ricos. No: vamos a por los débiles primero. Además ¿qué es eso de la globalización? ¿Qué «tenemos» que ver nosotros con África? ¿Es que alguien de verdad cree que los africanos se lanzan al mar en balsas hinchables de juguete? ¿Qué cojones le tienen que importar al forofo de la «roja» esos mugrientos africanos, esas putas negras que follan para quedarse embarazadas y que no las echen? Aborto obligatorio y vuelos de la muerte para ellas. Autarquía como en los años 40, que los españoles tenemos arrestos como para resolver la crisis mundial en casa nosotros solos y a ladrillazo limpio. Francamente, es difícil imaginar que se pueda condensar más pedagogía política utilizando menos saliva. Trabajando con ahínco por la sociedad española y global del futuro.

Vayamos a la perla de su compañero el aparatchik Uriarte, que se pregunta «qué estará pasando para que Zapatero haya tenido que preparar una reunión con africanos en Valencia y no con valencianos». Lo que pasa es que habría que ver al sr. Uriarte tirado a pelo en mitad del mercado de trabajo, ese que todo sanamente lo regula. Como ya sabemos que no le falta aplomo para conducir borracho por el centro de Madrid y no dimitir, tampoco le falta esta vez para insinuar la esencial oposición entre africanos y valencianos. Que no se puede ser africano y valenciano, vamos…

Y estos señores cobran como liberados ¿no, sra. Aguirre?

Mira que me gusta poco meterme en cotilleos y telemierda, pero a veces no queda otra…